

















Desde sugerencias sobre posturas y alivio del estrés hasta señales de alerta y cómo aliviar molestias, aquí te explicamos cómo aprovechar al máximo el masaje durante el embarazo.
Cualquier persona que haya recibido un masaje profesional sabe que tanto el cuerpo como la mente se sienten mucho mejor después. Lo mismo ocurre con el masaje prenatal, que puede resultar aún más beneficioso cuando el peso adicional y los cambios de postura provocan nuevas molestias.
Aquí tienes todo lo que las futuras mamás necesitan saber sobre el masaje durante el embarazo.
¿Qué es un masaje prenatal?
Los masajes prenatales están adaptados a los cambios anatómicos que experimentas durante el embarazo.
En una terapia de masaje tradicional, podrías pasar la mitad del tiempo boca abajo (lo cual no es factible con un bebé) y la otra mitad boca arriba (una posición que ejerce presión sobre un capilar importante, lo que puede interrumpir el flujo sanguíneo hacia tu bebé y provocar náuseas).
Pero a medida que tu cuerpo y postura cambian, un masajista cualificado adaptará la posición con sistemas de acolchado especiales o aberturas que te permitan estar boca abajo de forma segura, a la vez que ofrecen espacio para tu vientre y pechos en crecimiento. También puedes apoyarte de lado con la ayuda de cojines y almohadas.
¿Pueden las mujeres embarazadas recibir masajes?
Los masajes prenatales se consideran generalmente seguros siempre que cuentes con la aprobación de tu médico y le informes al masajista de tu embarazo, según el Colegio Estadounidense de Obstetras y Ginecólogos (ACOG). Sin embargo, conviene evitar los masajes durante los tres primeros meses de embarazo, ya que podrían provocar mareos y contribuir a problemas de salud matutinos.Lee sobre ello https://relajante-masaje-valencia.com/masaje-embarazada/ de nuestros artículos
Independientemente de las ideas erróneas que hayas escuchado, no existe un botón mágico para interrumpir el embarazo de forma involuntaria, y no hay mucha evidencia científica sólida de que ciertos tipos de masajes puedan influir en ello.
Algunos masajistas evitan ciertos puntos de presión, como el que se encuentra entre el tobillo y el talón, por temor a que pueda causar contracturas, pero la evidencia sobre si los masajes pueden inducir el parto es inconclusa.
Dicho esto, es recomendable evitar los masajes en la barriga, ya que la presión en esa zona durante el embarazo puede causar molestias.
Si te encuentras en la segunda mitad del embarazo (después del cuarto mes), no Recuéstese boca arriba durante el masaje; el peso del bebé y el útero puede comprimir los capilares y reducir el flujo sanguíneo a la placenta, lo que puede causar más problemas de los que cualquier masaje puede solucionar.
Además, no espere recibir un masaje de tejido profundo en las piernas durante una sesión de masaje prenatal. Si bien la presión suave es segura (¡y puede ser una sensación maravillosa!), las mujeres embarazadas tienen un mayor riesgo de embolia, la cual puede ser desplazada por un masaje profundo. Esto, a su vez, puede ser peligroso.
En otras partes del cuerpo, la presión puede ser firme y tan profunda o suave como desee. Siempre consulte con su terapeuta sobre qué le resulta cómodo y si siente algún dolor.
Otro punto importante: si bien, en teoría, cualquier terapeuta de masaje puede atender a mujeres embarazadas, es recomendable acudir a un profesional con al menos 16 horas de formación especializada en masaje prenatal. (No hay acreditación específica, así que debe preguntar al programar su consulta). De esta manera, puede tener la seguridad de estar en manos de una persona que sabe exactamente cómo eliminar cualquier tipo de dolor y estrés relacionado con los cambios en su cuerpo.
Por último, consulte siempre con su médico antes de recibir un masaje prenatal, especialmente si padece diabetes, náuseas matutinas, preeclampsia, hipertensión, fiebre, un virus infeccioso, dolor abdominal o sangrado. Estas son complicaciones que pueden hacer que la terapia de masaje durante el embarazo sea de alto riesgo.
¿Cuáles son los beneficios de la terapia de masaje prenatal?
Estudios revelan que la terapia de masaje puede reducir las hormonas de la ansiedad en el cuerpo y relajar los músculos. También puede mejorar el flujo sanguíneo, tan importante durante el embarazo, y mantener el sistema linfático funcionando de manera óptima. Y reconecta tu mente con tu cuerpo, una conexión reconfortante si en algún momento te preguntas si hay un bebé ahí dentro o si un extraterrestre se ha instalado en tu interior.
«Me regalo constantemente masajes prenatales, sobre todo en el tercer trimestre. ¡Desconectar es necesario y aliviar el dolor es fundamental al final del embarazo!» Según AndieDM, mamá de la comunidad What to Expect.
Durante el embarazo, los masajes prenatales regulares no solo pueden ayudarte a relajarte, sino que también pueden aliviar:
- Problemas para dormir
- Dolor articular
- Dolor de cuello, espalda y nuca
- Calambres en las piernas
- Ciática
- Hinchazón en manos y pies (siempre que no sea resultado de preeclampsia)
- Dolor en el túnel carpiano
- Dolores de cabeza y congestión nasal
¿Cuánto cuestan los masajes prenatales?
Muchos seguros médicos no cubren los masajes prenatales, pero algunos ofrecen descuentos, lo cual es una ventaja considerando su precio. Una sesión de terapia puede costar entre $60 y $100 o más por un masaje de 30 a 60 minutos, dependiendo del lugar y el centro.
Sigue tus síntomas y descubre qué es seguro durante el embarazo en la app What to Expect (se abre en una nueva ventana), donde encontrarás consejos de profesionales, recomendaciones de otros padres y trucos para sentirte mejor en cada etapa.
Cómo dar un masaje prenatal en casa
Pídele a tu pareja o a una amiga que siga estos consejos para dar un masaje prenatal en casa:
Masaje suave de pies. Con crema para facilitar los movimientos, tu pareja puede empezar masajeando el empeine con una presión suave, desde los dedos hacia el tobillo, haciendo pequeños círculos alrededor de la articulación. Después, pídales que usen ambos pulgares para hacer pequeños círculos en la planta del pie, justo debajo de los dedos. En el talón, pueden mover un pulgar hacia abajo mientras el otro sube, alternando. También pueden tirar suavemente de cada dedo del pie y usar el índice o el pulgar para frotar entre ellos. Es recomendable evitar la presión entre el tobillo y el talón.
¿Otra opción? Pruebe el yoga prenatal por su cuenta: ¡Los estiramientos y la respiración pueden ayudarle a desestresarse y relajarse rápidamente!

